1 de septiembre de 2011

Michael LAUDRUP, El rey danés sin corona


¿Habrían pasado a la historia del fútbol Pelé, Diego Armando Maradona o Zinedine Zidane si no hubiesen participado en el torneo más importante disputado por sus selecciones? Basta con mirar a Dinamarca para responder a esa pregunta: calidad y talento son independientes del palmarés. Michael Laudrup, mejor jugador danés de todos los tiempos, no estuvo presente en el mayor momento de gloria de su país. Sin embargo, la huella que dejó en el deporte rey es muy superior a la de sus compatriotas que ganaron la Eurocopa de 1992.

“En los años 60, el mejor era Pelé. En los 70 Cruyff, en los 80 Maradona. Y en los 90, Laudrup”. Esta afirmación puede ser discutible, pero el hecho de que su autor sea nada menos que Franz Beckenbauer le otorga más peso. 


Y Michael Laudrup y su hermano pequeño, Brian, siempre cargaron con un peso considerable a sus espaldas desde que dieron sus primeros pasos en el fútbol. Les viene de familia. Los hermanos Laudrup, hijos de Finn, ex internacional, y sobrinos de Ebbe Skovdahl, un entrenador exitoso, estaban obligados a triunfar. Y ese fue precisamente el objetivo que se fijó Michael, quien sin duda tiene carácter. Por eso, cuando apenas había cumplido los 13 años, se permitió el lujo de declinar la oferta del Ajax de Amsterdam para seguir a su padre, que había fichado por el Kjøbenhavns Boldklub, club precursor del FC Copenhague, al considerar que era demasiado pronto para irse del país, antes de haberse consolidado. 

Tras pasar de las palabras a los hechos y ser elegido a los 18 años mejor jugador de Dinamarca con el Brøndby, ese mismo carácter le hizo rechazar un traspaso a otro club mítico. “Había cerrado un acuerdo para un contrato de tres años con los representantes del Liverpool”, confesaría el genial escandinavo unos años después de colgar las botas. “Pensaba que ya estaba hecho. Unos días más tarde volvieron con la misma oferta, pero de cuatro años, ya que decían que era muy joven y necesitaba tiempo para desarrollarme. Eso me decepcionó, y decidí no fichar por el club. No habíamos firmado nada, pero un acuerdo es un acuerdo. Hay que respetar lo que se dice”.


Cualquier cosa menos... egoísta
La directiva del Juventus sí sabía lo que quería, y aprovechó la oportunidad de contratar al prometedor muchacho en junio de 1983. Esta vez todo se hizo según lo previsto, pero Laudrup pagó los platos rotos de su juventud. El danés tenía la competencia de Michel Platini y Zbigniew Boniek en un once limitado entonces a dos jugadores extranjeros, de modo que fue cedido al Lazio, recién ascendido a la Serie A, donde destacó gracias a sus pases milimétricos y sus certeros lanzamientos de falta. En dos temporadas sumaría una decena de goles. Y, con la marcha del polaco de la Juve, llegó la hora de que se codease con los grandes. 

Laudrup lo sustituyó como escolta de Platoche y ganó la liga y la Copa Intercontinental en 1986. Empezó a dibujar los primeros trazos del retrato que dejaría en la galería de las leyendas: un genio que no llegó a alcanzar su límite. “Jugué contra Maradona, Platini y Baggio, pero quien era capaz de las jugadas más increíbles era Michael Laudrup”, recuerda Roberto Galia, ex internacional italiano compañero suyo durante su último año en Turín. Platini completa ese recuerdo: “Uno de los más grandes talentos de todos los tiempos”, opina el ex mediapunta de la selección francesa. “El mejor del mundo en los entrenamientos, pero que nunca explotó todas sus cualidades durante los partidos. Michel lo tenía todo, excepto una cosa: no era lo bastante egoísta…”.


¿Laudrup pensaba demasiado en los demás? Eso fue lo que convenció a Johan Cruyff, entrenador del FC Barcelona, quien utilizó su generosidad para alimentar a un depredador como Hristo Stoichkov. Con el holandés en el banquillo, el danés a la batuta y el búlgaro en el remate, el Barça pasó de ser un gran equipo a convertirse en un club legendario. Entre 1990 y 1994, Laudrup y sus compañeros ganaron cuatro ligas, una Copa de Europa y un nombre para la eternidad: el Dream Team.

Pero los actos fallidos se fueron acumulando para él. Asistió como suplente a la final de la Liga de Campeones de la UEFA de 1994 frente al AC Milan, que los italianos se adjudicaron de forma tan sorprendente como arrolladora (4-0). “Laudrup era el jugador que yo más temía, y Cruyff cometió el error de no alinearlo”, comentó el técnico milanés, Fabio Capello, tras la exhibición de sus hombres.


La hora del desquite
No hizo falta más para despertar en Laudrup los sentimientos que le habían hecho plantar cara a Ajax y Liverpool unos años atrás. Respondió a la afrenta fichando por el acérrimo adversario del club, el Real Madrid, a pesar del cariño que sentían por él los hinchas catalanes. “No fue cuestión de vengarse”, explicaría, no obstante. “Mi etapa en el Barça se había acabado, igual que el Dream Team, también. Me fui al Madrid porque quería jugar en un equipo capaz de aspirar al título y quedarme en España”.

Alcanzó ese objetivo al final de la temporada siguiente, con una liga en 1995. Y el desquite de Laudrup fue total con el triunfo del cuadro merengue por 5-0 en el clásico, un año después de imponerse mediante ese mismo tanteo en el bando blaugrana. Michael realizó uno de los mejores partidos de su carrera. Destacó una asistencia suya a Iván Zamorano, autor de tres goles. “¿La razón por la que marqué tantos goles con el Real Madrid? ¡Laudrup!”, señala el chileno, en homenaje a su antiguo compañero. 
 
Al cabo de dos campañas en la capital de España, el danés tenía 32 años, y quizás pensaba ya en retirarse cuando se incorporó a la incipiente J-League, con el Vissel Kobe. Pero los seis goles que anotó en 15 partidos durante la temporada 1996/97 le recordaron que aún tenía nivel para brillar en el Viejo Continente. Como guiño del destino, su última etapa fue en el mismo club cuya oferta había rechazado dos decenios antes. Laudrup fichó por el Ajax de Amsterdam, y concluyó su carrera con un título de campeón de Holanda. 

Con todo, no siempre se pueden enmendar los errores de la juventud, y la leyenda de Laudrup no sería tan hermosa sin la relación fallida que tuvo con la selección danesa. El genial centrocampista ofensivo participó en tres ediciones de la Eurocopa (1984, 1988 y 1996) y ganó la Copa FIFA Confederaciones 1995. También fue uno de los míticos Danish Dynamites que deslumbraron al planeta con motivo de su estreno en la Copa Mundial de la FIFA, en 1986. E incluso marcó un magnífico tanto contra Uruguay en una goleada de los nórdicos (6-1). 


No viaja al torneo
Pero todos esos éxitos no compensaron su decisión de abandonar el combinado nacional durante la fase previa de la Eurocopa 1992. Tras la derrota por 2-0 ante Yugoslavia, en desacuerdo con las decisiones tácticas de su seleccionador, dio un portazo y juró que no volvería a jugar a las órdenes de Richard Møller Nielsen. Calculó mal. Si bien fue eliminada, Dinamarca terminaría participando en el torneo a raíz de la suspensión de Yugoslavia, y Møller Nielsen se mantuvo en el cargo.

Todos saben lo que ocurrió luego. Se formó a última hora, con futbolistas que ya preparaban sus vacaciones, un equipo que puso rumbo a Suecia y encadenó una gesta tras otra hasta alzar el mayor título continental. El mejor jugador danés de la historia acababa de perderse el momento de gloria de su país…


En 1993, ante la presión popular, Laudrup dio marcha atrás y regresó a la selección dirigida por… ¡Møller Nielsen! “No quería rectificar una decisión que era firme. Pero, al mismo tiempo, ¡cada vez tenía más ganas de jugar con ellos! Con el seleccionador, hubo una aproximación mutua. Al equipo le faltaba disciplina. Yo no me sentía capaz de hacer lo que él esperaba de mí, asumir el liderazgo del equipo. Pero me convertí en un líder en el Barça, como organizador de juego, y al final me fue bastante bien con esa función…”.

Laudrup disputaría el último de sus 104 encuentros como internacional en cuartos de final de Francia 1998, ante Brasil. Los europeos cayeron por 3-2 después de tutear en la cancha a los campeones del mundo. Cuando acabó el partido, el capitán derrotado anunció lo que toda Dinamarca temía: “Ha sido el último de mi carrera”. A continuación añadió: “Pero también ha sido uno de los mejores, incluso el mejor”.

El mejor, saldado con una derrota. Un resumen de la carrera de un rey sin corona.



5 de agosto de 2011

Bundesliga 2011, análisis de los equipos


Bayern Múnich: Acumula rivales cada temporada, es el gran enemigo a batir y el único ‘gigante’ habitual que jamás cede en su empeño por seguir la estela de éxitos europeos. Un año gris, donde los resultados dubitativos obligaron al fin de la época de Van Gaal y a reestructurar un nuevo proyecto con el eternamente muniqués Jupp Heynckes, obligan más que nunca a un título y los bávaros no encontrarán satisfacción sin recuperar su trono germano.

“La Bundesliga verá al auténtico Bayern”, dijo el presidente Uli Hoeness esta semana, buscando ese respeto y temor hacia los rivales, que hace años no logra experimentar el público del Allianz. La base sigue siendo la misma, con los intocables Schweinsteiger, Lahm, Muller, Robben o Ribery como estrellas, aunque se les suma el portero más mediático, Manuel Neuer, cuyo fichaje (18 millones de euros), se convirtió en el show veraniego. Se suman a la causa el internacional Jerome Boateng (12 millones), el brasileño Rafinha para el lateral diestro, el goleador de la Bundesliga 2 el curso pasado Petersen y el japonés Takashi Usami, joven estrella nipona. Obligado a disputar una fase previa de Champions, en Baviera no hay margen de error. Sólo sirve ser campeón.


Borussia Dortmund: Jóvenes talentosos, hambrientos de éxito y dirigidos bajo la batuta inteligente del fútbol asociativo y técnico. La larga lista de elogios recibidos el pasado año por el campeón alemán, sigue siendo su mejor aliado para defender trono y sensaciones este curso, donde pocas cosas han cambiado en el Westfalen pero donde se multiplican las obligaciones para un club, pese a todo, basado en una línea quizás demasiado joven. El carismático Jurgen Klopp sigue siendo director del proyecto BVB, el que mayor tevelación y sorpresa levantó hace sólo unos meses y el mismo que ahora pretende consolidarse y readaptarse a las exigencias de compartir competitividad con la Champions League.  Al menos, ha logrado frenar el temible desmentalamiento de su plantilla. 

Viene de una pretemporada tranquila pero cayó en la Supercopa. Su principal problema es la marcha de Nuri Sahin (Real Madrid), puesto que el turco representaba el pilar sobre el que se sustentaba el guión de juego del equipo. Para intentar mitigar su marcha, ha llegado otro mediocentro con proyección, Ilkay Gundogan, que se sumó a Ivan Perisic (fichaje estrella del verano) y Chris Lowe. La salud debe estar asegurada con la capacidad de Gotze, Barrios (se pierde las primeras jornadas por lesión), Hummels, Subotic y, desde luego, con la recuperación tras grave lesión, del japones Shinji Kawaga.

 Bayer Leverkusen: Fue la alternativa al dominio amarillo el pasado curso, recuperando el prestigio del ‘Neverkusen’ como candidato eterno a levantar un título cuando nadie hubira apostado a ello. Los del Bay Arena mantienen el bloque que les devolvió a la Champions League con su segunda plaza (Sam, Rolfes, Derdiyok, Kiessling), pero han dejado escapar sus dos principales referentes. La salida de Jupp Heynckes supone un golpe moral a un proyecto perfectamente definido que ahora tendrá que intentar mantener en pie Robin Dutt (ex Friburgo), uno de los entrenadores con mayor futuro del país. Tampoco está su mediocentro y líder caracterial, el chileno Arturo Vidal, que tras estar todo el verano coqueteando con el Bayern, decidió marcharse a la Juventus. El refuerzo estrella, André Schurrle, llegador y joven realidad tras su temporadón en el Mainz.

Schalke 04 : La convulsión terminó y, tras ella, la paz debe consumarse en Gelsenkirchen. Cesado Magath y atravesada la complicada relación que mantenía con su vestuario y directiva, los últimos meses del curso pasado, mostraron el camino que pretende seguir el proyecto de Ralf Rangnick. La gloria europea ocultó graves problemas de regularidad y concentración en la Bundesliga, donde fueron meros comparsas, alejados en exceso de sus intenciones europeas. Con la salvación continental de la Europa League tras haber levantado la DFB Pokal (Copa Alemana), la necesidad vuelve a ser responder como merece la nutrida hinchada minera. Raúl vive instalado en una situación dubitativa donde puede estar ante su último año competitivo o su ostracismo, Jurado debe dar un paso adelante como enganche de un club necesitado de creatividad y han llegado refuerzos competitivos como Fuchs-Holtby (pareja líder ex Mainz), el portero Fahrmann o el delantero rumano, Marica.

Tras ellos, una larga lista de clubes que aseguran equidad y equilibrio. Comprobamos que equipos bien trabajados en su base táctica (Nuremberg y Hannover) o atrevidos en sus planteamientos ofensivos (Mainz y Friburgo), ya fueron protagonistas con merecimiento y se muestran capacitados para otorgar un ‘extra’ competitivo cada jornada. Además, pese a atravesar graves momentos deportivos, Werder Bremen, Wolfsburgo, Stuttgart o Hamburgo, conservan individualidades y poderío institucional para renacer en cualquier momento. El regreso del fútbol de máximo nivel a la capital con el ascenso del Hertha de Berlín y la llegada a la élite del semi-desconocido Augsburg bávaro, aglutinan más detalles interesantes a la Bundesliga. Arranca el show. Alemania exporta sapiencia futbolística desde este viernes.

25 de julio de 2011

Uruguay Campeón Copa América 2011

Uruguay ganó a Paraguay (3-0) en la final de la Copa América 2011 con una actuación memorable de Luis Suárez y se hizo con su decimoquinto título continental.


El “Tata” Martino salió al campo nuevamente con un planteamiento claramente defensivo y dejando a Lucas Barrios en el banco, en beneficio de Cevallos.


Uruguay por su parte fue más ambicioso y buscó desde el principio el marco rival. Y ya a los dos minutos tuvo una oportunidad mediante un cabezazo de Luis Suárez que paró Justo Villar y que en el posterior rechazo sacó bajo palos con las manos –en una acción que no apreció el árbitro- el medio guaraní Ortigoza.


El dominio charrúa rápidamente se tradujo en el primer tanto, obra del delantero Luis Suárez, hasta el momento el mejor del choque, que recibió un balón en el borde del área y tras romper la cintura a Verón, disparó cruzado para meter el primer gol de la final.


Paraguay intentó tomar el control del medio campo, pero seguía demasiado inoperante en la parcela ofensiva como para empatar, y era Uruguay sin embargo, quien gozaba de las mejores ocasiones, como una de Forlán, que Justo Villar acertó a parar en un mano a mano.


Antes del descanso llegó una nueva estocada de los charrúas, que metieron el segundo tanto en el minuto 42, en un robo de balón de Arévalo Ríos que Forlán metió en el fondo de la red con un potentísimo disparo.


Tras el descanso Paraguay pareció salir más concentrada y tomó de nuevo la posesión del balón, aunque siempre con pases demasiado horizontales y muy poco  profundos. En una de las pocas ocasiones guaraníes, estuvieron cerca de recortar diferencias. Un tiro de Valdez, que obligó a Muslera a estirarse de manera prodigiosa y tocar el balón para que éste se estampase contra el travesaño.

A la hora de partido Riveros gozó de una nueva oportunidad clara y esta fue la última de Paraguay, que se fue apagando con el paso de los minutos.


Fue entonces cuando Uruguay se empezó a saber ganadora del torneo y se vino arriba. Tabárez dio entrada a Cavani por Álvaro Pereira y en una jugada del delantero del Nápoles dentro del área, acabó con disparo de Luis Suárez que despejó con dificultades Justo Villar.


Y cuando el partido ya agonizaba llegó el tercer y definitivo gol uruguayo. Un contragolpe rapidísimo que acabó con un pase de Luis Suárez a Forlán, y que el delantero del Atlético de Madrid metió en la portería paraguaya para alegría de los miles de charrúas que estaban viendo el partido en la capital argentina.


Con el pitido final llegó la alegría desbordada sobre el césped de un Estadio Monumental que pocas semanas antes había vivido el histórico descenso de River Plate.


Uruguay se hace con su 15º título continental y se pone al frente del palmarés de la competición, dejando patente además, que a día de hoy es la mejor selección de Sudamérica.

Resúmen del torneo:
Grupo A
Argentina - Bolivia - Colombia - Costa Rica
                                                                                                    
1/7
(21.45) - La Plata: Argentina 1-1 Bolivia
2/7
(15.30) - Jujuy: Colombia 1-0 Costa Rica
6/7
(21.45) - Santa Fe: Argentina 0-0 Colombia
7/7
(19.15) - Jujuy: Bolivia 0-2 Costa Rica
10/7
(16.00) - Santa Fe: Colombia 2-0 Bolivia
11/7
(21.45) - Córdoba: Argentina 3-0 Costa Rica
Posiciones: Colombia 7 (+3); Argentina 5 (+3); Costa Rica 3 (-2); Bolivia 1 (-4).

Grupo B
Brasil - Ecuador - Paraguay - Venezuela

3/7
(16.00) - La Plata: Brasil 0-0 Venezuela
3/7
(18.30) - Santa Fe: Paraguay 0-0 Ecuador
9/7
(16.00) - Córdoba: Brasil 2-2 Paraguay
9/7
(18.30) - Salta: Venezuela 1-0 Ecuador
13/7
(19.15) - Salta: Paraguay 3-3 Venezuela
13/7
(21.45) - Córdoba: Brasil 4-2 Ecuador 
Posiciones: Brasil 5 (+2); Venezuela 5 (+1); Paraguay 3 (0); Ecuador 1 (-3).

Grupo C
Uruguay - Chile - México - Perú

4/7
(19.15) - San Juan: Uruguay 1-1 Perú
4/7
(21.45) - San Juan: Chile 2-1 México
8/7
(19.15) - Mendoza: Uruguay 1-1 Chile
8/7
(21.45) - Mendoza: Perú 1-0 México
12/7
(19.15) - Mendoza: Chile 1-0 Perú
12/7
(21.45) - La Plata: Uruguay 1-0 México
Posiciones: Chile 7 (+2); Uruguay 5 (+1);  Perú 4 (0); México 0 (-3).


Cuartos de final
16/7
(16.00) - Córdoba: Colombia 0-2 Perú
16/7
(19.15) - Santa Fe: Argentina 1-1 Uruguay (4-5 en penaltis)
17/7
(16.00) - La Plata: Brasil 0-0 Paraguay (0-2 en penaltis)
17/7
(19.15) - San JuanChile 1-2 Venezuela

Semifinales
19/7
(21.45) - La Plata: Perú 0-2 Uruguay
20/7
(21.45) - Mendoza: Paraguay 0-0 Venezuela (5-3 en penaltis)

Tercer puesto
23/7
(21.45) - La Plata: Perú 4-1 Venezuela

Final
24/7
(21.45) - Buenos Aires: Uruguay 3-0 Paraguay
Síntesis de la final:
Estadio Monumental Antonio Vespucio Liberti (Buenos Aires) 

Uruguay: Muslera; Maximiliano Pereira, Lugano, Coates, Martín Cáceres (Godín, m.88); Alvaro González, Diego Pérez (Eguren, m.79), Arévalo Ríos, Álvaro Pereira (Cavani, m.63); Forlán y Luis Suárez.

Entrenador: Tavárez

Paraguay: Justo Villar; Piris, Verón, Da Silva, Marecos; Vera (Estigarribia, m.64), Riveros, Víctor Cáceres (Hernán Pérez, m.64), Ortigoza; Haedo Valdez y Zeballos (Lucas Barrios, m.76).

Entrenador: G. Martino

Árbitro: Salvio Fagundes. Amonestó a V. Cáceres y Vera (Paraguay) y a Diego Pérez, Martín Cáceres, Maxi Pereira y Coates (Uruguay)

Goles: 1-0 (Luis Suárez 12’), 2-0 (Forlán 42’), 3-0 (Forlán 90’)


Premios individuales del Torneo: 
Mejor Jugador del Torneo:   Luis Suárez (Uruguay)
Mejor Jugador Joven del Torneo:   Coates (Uruguay)
Mejr Portero del Torneo:  Justo Villar (Paraguay)

19 de julio de 2011

Paolo Maldini, "IL CAPITANO"

Existen muchos tipos de defensas, contundentes, rápidos, luchadores...pero sin duda, si nos piden una definición de 'Il Capitano', a la mayoría el primer adjetivo que se nos ocurriría sería el que mejor define a este jugador: elegante.

No se entendería la historia reciente del AC Milan sin el nombre de Maldini y su camiseta número 3 (número que, tras dejar el fútbol fué retirado en su honor, un honor que aparte de él, solo consiguió Franco Baresi y su también mítico 6)


Paolo Maldini nació el 26/06/1968 en Milán. A su nacimiento ya estaba en cierto modo enlazado al club 'rossonero' de la ciudad lombarda, ya que su padre es otro jugador que marcó una época en el club, Cesare Maldini, capitán de la Champions League ganada por el AC Milan en 1963.

Leyenda del fútbol italiano y mundial , 7 ligas , 5 supercopas y 1 copa italiana son su palmarés nacional , pero donde más ha ganado este jugador ha sido en las competiciones europeas , nada más y nada menos que 5 copas de Europa , a parte de otras 5 supercopas , 2 intercontinentales y un mundial de clubs.
Lo más increíble de este jugador es siempre se mantuvo al máximo nivel toda su carrera, pese a retirarse con una edad que superaba ampliamente la treintena (mejor defensa en la Champions de 2007 , con 39 años , por poner un ejemplo)

Carrera:

Pasó toda su carrera en el Milan, donde debutó como profesional en la temporada 84/85, sustituyendo al lesionado Sergio Battistini en un partido de Serie A contra el Udinese. Por aquel entonces contaba con 16 años. Fue su única aparición de la temporada con el primer equipo, pero ya en la siguiente temporada, formó parte regularmente del once titular del equipo por entonces entrenado por Nils Liedhom.
Pero no fue hasta la temporada 87/88, (ya con el preparador que marcaría época a finales de los 80, Arrigo Sacchi, por su estilo de juego atacante, tan lejos de lo habitual en Italia, con la norma básica de 'atacar defendiendo') cuando Maldini logró su primer Scudetto, el primero de los 7 que lograría en su carrera, seguido por el que el equipo lograría en la 91/92, ya con Capello en el banquillo, Scudetto en el que el Milan terminaría imbatido, con un cuarteto defensivo que es considerado uno de los mejores de la historia del fútbol italiano: Baresi, Costacurta, Tasotti y el propio Maldini.
Pero sin duda, su consagración definitiva llegó en el año 94, cuando además de conseguir la tercera Champions League de su y llegar a la final del Mundial de 1994, se convirtió en el primer defensa ganador del premio al mejor jugador del año entregado por la revista Soccer Magazine. En el discurso de agradecimiento además señaló a su compañero Franco Baresi como un jugador que se merecía tanto como el un premio de ese tipo.
Terminaría jugando 8 finales de Champions League (de las que ganaría 5), y se convirtió en 2005 en el jugador con más partidos disputados en la Serie A, batiendo el record anterior de Dino Zoff, (570 partidos) cifra que aumentaría hasta el final de su carrera, dejando una marca final de 647 apariciones, y superaría los 1000 partidos en competición oficial.

Antes de su retirada manifestó que nunca se haría entrenador (rechazó una oferta de su ex entrenador Carlo Ancelotti para formar parte del cuerpo técnico del Chelsea)

Selección:

Fue internacional con la Selección de fútbol de Italia en 126 ocasiones y marcó 7 goles. Debutó el 31 de marzo de 1988, en el partido en el que Italia empató 1 a 1 con Yugoslavia. Su último partido lo disputó contra Corea del Sur el 18 de junio de 2002.
Maldini gano muchos títulos con el AC Milan, el Scudetto, la Copa de Europa entre otros logros, pero no logró su objetivo con la selección nacional de ganar algún título. Pese a ello logró entre otras cosas con su selección el subcampeonato mundial en 1994 frente a Brasil, donde Italia perdió enlos penaltis. Además disputó la final de la Eurocopa del año 2000, pero perdiéndola contra Francia en la prórroga.
En total disputo 126 encuentros en los que marcó siete goles, siendo el jugador italiano con más presencias en su selección nacional. En 74 de estos partidos actuó como capitán del equipo, siendo así el jugador que más veces ha ejercido la capitanía de la Selección Italiana-

20 de junio de 2011

Adel Taarabt. Futura estrella de la Premier


Con apenas 21 años, Adel Taarabt ha escuchado demasiadas veces que jamás será una estrella en el mundo del fútbol. Nunca faltó alguien que le recordara sus defectos. Le han acusado de trabajar poco, de ser demasiado egoísta, de estar poco implicado, de no jugar en equipo, de no ser profesional, de que su talento no era suficiente. El pasado verano, Taarabt tocó fondo. Decidió escapar de las críticas y se escondió en Marruecos, su país natal. Ocho meses después, ha sido nombrado jugador del año en Championship (segunda división inglesa) y este sábado -probablemente- logrará el ascenso a Premier League con el Queens Park Rangers.


El culpable de tan radical cambio es Neil Warnock, un técnico famoso por su fuerte temperamento. Tras renovar como entrenador del QPR -después de esquivar el descenso en tres meses- diseñó un proyecto que buscara el ascenso a Premier League y todo giraría en torno al talento de Adel Taarabt. “Warnock me llamaba todos los días para intentar ficharme -cuenta Taarabt- pero yo no quería escucharle. Al final vino a buscarme a Marruecos y me dijo que quería que me volviese con él”. Taarabt no pudo decir que no.



El Queens Park Rangers -Taarabt ya había estado cedido durante año y medio en el club- pagó alrededor de un millón de libras al Tottenham para satisfacer la petición prioritaria de su técnico. Abandonar White Hart Lane supuso una liberación para Taarabt, quien reconoce que se arrepintió de haber fichado por los Spurs, donde llegó a los 17 años como promesa pero apenas disfrutó de oportunidades: ”Damien Comolli contactó conmigo para llevarme al Arsenal, pero luego el Tottenham le contrató como director deportivo y me llevó con él. Cometí un error al seguirle. En el Arsenal con Arsene Wenger hubiese crecido mucho más”.


Una vez cerrado el fichaje que consideraba clave para sus planes, Neil Warnock comenzó a construir el equipo alrededor de la figura del marroquí. Cambió el esquema del once, varió el estilo de juego y redibujó las jugadas de estrategia. Hizo todo lo posible para que el Queens Park Rangers se convirtiera en un traje a medida para Taarabt. “Warnock ha creado el habitat ideal para que florezca el talento de Taarabt”, explica Paul Fletcher, periodista de BBC.



Sólo faltaba un detalle más. Warnock también le entregó el brazalete de capitán a Taarabt. Esa carga de responsabilidad extra fue la que terminó de mentalizar al marroquí de que no sólo debía pensar en sí mismo, sino también en todo el equipo. Debía convertirse en un líder. “El brazalete me motivó. Mucha gente pensaba que yo nunca podría ser capitán, que mi actitud no era la correcta. Ahora puedo callar muchas bocas“, presume Taarabt. La decisión fue criticada en el club en primera instancia, pero el tiempo dio la razón a Warnock.


La próxima temporada, Taarabt podrá lucirse en Premier League y, sobre todo, en White Hart Lane, donde quiere demostrar que se equivocaron al menospreciarle. Mientras tanto, Warnock se frota las manos con el diamante que ha sabido pulir: “Si alguien paga una entrada de fútbol es por ver a jugadores como Taarabt“.


14 de junio de 2011

SAMI HYYPIÄ: El Capitán Frío

Cuando se habla de futbolistas retirados la gente suele acordarse de los genios, los grandes jugadores que hacen levantarse a la gente del asiento o del sofá. Es justo reconocer su mérito, por supuesto, pero no debemos cometer el error de olvidar a aquellos otros futbolistas que desarrollan toda su carrera deportiva tratando de neutralizar el gran talento futbolístico de éstas grandes figuras y a su vez que se sacrifica para hacer más fácil el trabajo a sus compañeros con dichas virtudes. Son futbolistas con la capacidad de leer o anticiparse a las ideas de delanteros, mediapuntas o extremos, es decir, jugadores ofensivos en general.

La retirada ésta temporada de jugadores como Iván De la Peña, Paul Scholes o Martín Palermo ha relegado a un segundo plano la de un jugador que allá donde ha ido ha cumplido con su rol sin suponer problema alguno a compañeros o entrenadores con los que ha trabajado, hablo del defensa central finés Sami Hyypiä.

Primeros pasos
Éste jugador nació un 7 de octubre hace 37 años en la pequeña ciudad finlandesa de Porvoo que consta de apenas 50.000 habitantes. Comenzó su carrera deportiva en el humilde equipo Voikkaan Pallo-Peikot, en la localidad de Voikka. Su carrera a nivel profesional comenzó en 1992 en el equipo MyPa de la primera división finesa con el que ganó dos Copas de Finlandia. Los ojeadores centraron su atención en éste rubio de 1.95 por su efectividad en el juego aéreo y su excelente colocación. Al poco de debutar en la Primera División fue convocado por el seleccionador nacional para disputar un partido amistoso contra Túnez.
Willem II
Tras tres temporadas excelentes emigró a Holanda a las filas del Willem II en la 95/96, su gran papel en éste equipo le valió para fichar por el Liverpool de Gerard Houllier.

Liverpool
Su etapa en Anfield se prolongó durante 10 temporadas cargadas de éxitos. Allí compartió méritos y gloria en la zaga red durante muchos años con su compañero y amigo Jamie Carragher que todavía hoy defiende los colores reds y con otros grandes como Markus Babbel  (actual entrenador del Hertha de Berlín) o el suizo Stepháne Henchoz. La carrera de Hyypiä en el Liverpool fue meteórica. Su carisma, efectividad, colocación y su compañerismo hizo que enseguida se ganase los corazones de la afición. Éste sentir también caló en sus compañeros que apenas dos años después de aterrizar a orillas del Mersey lo convirtieron en el capitán del equipo hasta que irrumpió en escena el mítico Steven Gerrard.

Portó el brazalete durante una de las finales de la UEFA más emocionantes de los últimos años, allá por 2001 en Dortmund contra el equipo revelación de la competición: el Alavés de Mané. Un partido de infarto que se llevó el Liverpool con un gol en propia puerta de Geli en el minuto 117 de la prórroga. También disputó la famosa final de la Champions de Estambul en 2005 contra el Milán, partido que el Liverpool perdía 3-0 al descanso y que en 45 minutos de ensueño consiguió igualar y finalmente vencer en la tanda de penaltis. A pesar de su experiencia, la llegada durante la siguiente temporada a la entidad red del joven defensa central Daniel Agger lo relegó al banquillo. Hyypiä podía haber puesto el grito en el cielo pero asumió su papel con total naturalidad y ayudó al equipo siempre que Rafa Benítez se lo pidió. Finalmente se despidió del Liverpool habiendo logrado ganar la Champions League en 2005, la Copa de la UEFA en 2001, dos Supercopas de Europa en 2001 y 2005, una FA Cup en 2006, dos Carling Cups en 2001 y 2003 y dos Cummunity Shield en 2001 y 2006. La afición se despidió de él en su último partido en Anfield con un mosaico gigante en The Kop formado por la bandera de Finlandia y su nombre, Sami, en letras gigantes y una sonora ovación que se prolongó durante varios minutos. Gesto correspondido por el jugador en compañía de sus hijos y compañeros con una vuelta de honor inolvidable.


 
Bayer Leverkusen
Llegó al Bayer Leverkusen en la temporada 09/10 firmando un contrato por dos años donde consiguió un subcampeonato de la Bundesliga en su última temporada. En Octubre de 2010 anunció su retirada públicamente para pasar a formar parte del staff técnico del equipo alemán.


 
Internacional
Debutó el 7 de Noviembre de 1992 en un amistoso contra Túnez con tan sólo 19 años y disputó su último partido en 2010 tras 18 años con el equipo nacional. Sucedió en la capitanía finlandesa al mítico jugador Jari Litmanen. Internacional en 105 ocasiones con la camiseta de Finlandia y marcando 5 goles Sami Hyypiä nunca disputó la fase final de una gran competición a nivel de selecciones.



6 de junio de 2011

Alexander Merkel: Futuro Rossonero


Merkel es un centrocampista ofensivo con llegada al marco rival. Con un gran manejo de ambas piernas, no es un superdotado a nivel técnico, sino que es un futbolista más efectivo que efectista. Sin grandes alardes, su estilo de juego es ese que encandila a los técnicos, anteponiendo el beneficio del colectivo al lucimiento personal. Extraordinariamente dinámico, la pide tanto al pie como al espacio buscando entrar en contacto con el cuero. Con gran capacidad asociativa, tira paredes con suma facilidad y su movilidad provoca que casi siempre esté en línea de pase. Un centrocampista versátil, capaz de desenvolverse en cualquier demarcación de la zona de tres cuartos e incluso, en situaciones de urgencia, como pivote ofensivo.

Dotado de una buena conducción de balón en carrera, es rápido y desborda con facilidad. Realiza interesantes movimientos con y sin balón, además de demostrar gran osadía en muchas de sus acciones individuales. Preciso tanto en el envío corto como en el largo, es capaz de realizar buenos pases en profundidad. Además, golpea el balón de forma magnífica y su disparo desde fuera del área es fortísimo, representando una gran amenaza para los porteros rivales. Un mediocampista de ida y vuelta, muy peligroso en labores ofensivas y sacrificado a la hora de echar una mano en la recuperación del cuero. En este sentido, y aunque es un chico disciplinado en el apartado táctico y dotado de un buen fondo físico, necesita mejorar en la dosificación de esfuerzos para llegar más fresco a los instantes finales del partido. En definitiva, un centrocampista muy equilibrado que siempre ofrece un rendimiento muy beneficioso para su equipo.

Alexander Merkel nació en la ciudad kazaja de Pervomayskiy el 22 de Febrero de 1992. Hijo de ciudadanos rusos, a los seis años de edad se trasladó junto a sus padres al país teutón. Nada más asentarse en territorio germano, se enroló en las filas del modesto JSG Westerwald. Tras un lustro allí, el VFB Stuttgart le reclutó para sus categorías inferiores. En el club de Baden-Württemberg no solamente continuó con su progresión sino que su crecimiento fue tal que uno de los grandes equipos del continente europeo como el AC Milan consiguió hacerse con sus servicios. Así, con tan solo dieciséis años hizo las maletas rumbo a Milanello.

En el cuadro rossonero pronto se erigió como una de las mayores promesas del sector juvenil del club presidido por Silvio Berlusconi. Fue quemando etapas hasta llegar al conjunto primavera, en el que realizó historia tras proclamarse campeón de la Coppa de Italia en esa categoría acabando con una racha negativa que ya duraba un cuarto de siglo. El alemán fue pieza clave en la consecución de ese campeonato, por ello no resulta extraño que Massimiliano Allegri le llevara, junto a otros compañeros de generación, al stage de pretemporada de la primera plantilla. En una competición veraniega cuyo prestigio va al alza como la Emirates Cup, Merkel encandiló al preparador nacido en Livorno y se ganó el derecho a formar parte de la primera plantilla. Tuvo que ser paciente, pues su debut no se produjo hasta el mes de diciembre del año pasado, en el intrascendente duelo de Champions League frente al Ajax. Sin embargo, la espera mereció la pena, pues desde su estreno en la élite continental ha ido adquiriendo protagonismo gradualmente hasta convertirse en uno de los cambios habituales de Allegri en los segundos tiempos e, incluso, ha disfrutado de la titularidad en los últimos encuentros.

Aunque en un principio manifestó su deseo de defender al combinado nacional ruso, la torpeza de las autoridades rusas provocó el enfado del talentoso centrocampista, que cambió su decisión y decidió representar los intereses de Alemania, selección con la que es internacional sub-19, previo paso por todas las categorías inferiores desde la sub-15.

De extraordinaria fortaleza mental, Merkel es un chico bastante maduro que solo piensa en consolidarse en la primera plantilla del club lombardo para algún día poder debutar en el combinado nacional germano dirigido por Joachim Löw.